Rubén Castro: "En el Cartagena sí me querían de verdad"

Rubén Castro recala a sus 39 años en la entidad de Benipila. Es el fichaje estrella del Cartagena y eso se notó ayer en la zona del FCC Business, lugar elegido para todas las presentaciones en este verano largo y raro.

Aunque la pandemia impide aglomeraciones, aficionados en la puerta o en las gradas y ese tipo de cosas que siempre han acompañado a ceremonias como la de ayer, en el acto se respiró un ambiente distinto. Allí estaba Rubén Castro, el máximo goleador de la historia del Real Betis y sexto jugador con más encuentros a sus espaldas en las dos primeras categorías del fútbol español. Palabras mayores para un recién llegado como el Efesé.

"Es un orgullo sumarnos a este proyecto, que tiene una fuerza increíble y que seguirá creciendo hasta llegar a Primera División".
"Me quería el Cartagena y eso es lo más importante para un jugador de fútbol. Yo quería ir a un sitio en el que apostaran por mí, de verdad. Esa es la clave. Yo vengo con muchísima ilusión y estoy muy contento de firmar con un gran club. Fue todo muy fácil desde el primer día, porque me transmitieron mucha confianza. Estoy para jugar este domingo si el míster lo cree conveniente», destacó el ex de la UD Las Palmas, acompañado de su pareja, la influencer alicantina María Hernández, y de sus dos hijos.

Él tenía un año más de contrato con el conjunto amarillo y Pepe Mel, su técnico, contaba con sus servicios. Fue, de largo, el mejor de los grancanarios tras el parón por la Covid-19. Después del confinamiento, olvidados los problemas físicos que le tuvieron en el dique seco durante la primera vuelta, se desató anotando 10 goles en los últimos 11 partidos, todos sin público en las gradas. Fue el máximo goleador de Segunda en el tramo final del campeonato. Goles y más goles. Lo que siempre ha hecho. Pero con 39 años y tras muchos meses parado. Doble mérito.

Cláusula liberatoria
Lo normal era que siguiera en su casa y se retirara allí, donde se crió y debutó en la élite. Sin embargo, ejecutó la cláusula liberatoria que existía en su contrato para marcharse. Cobró 300.000 euros y se fue, dejando huérfano el ataque de la UD Las Palmas. Sintió que no lo querían. Al menos, no como lo habían querido antes. Y se fue. Su idea es jugar "uno o dos años más". No se le pasó por la cabeza irse a ganar un dineral al extranjero, tal vez porque su experiencia en China fue tan corta como amarga. Nunca fue feliz allí. Tampoco se ha planteado aún colgar las botas.

Las claves

El cartagenero José Esteban Yepes, entrenador de porteros de la UD Las Palmas, fue uno de los que recomendó a Rubén Castro que fichara por el Efesé. "Es una gran persona, muy buena gente. Y sí que hablé con él y me habló maravillas del proyecto, de la manera de hacer las cosas que tienen en el club y de la ciudad», contó ayer Rubén Castro. También le animó venir Alberto de la Bella, con quien ha compartido vestuario las dos últimas temporadas y con el que se reencontrará ahora en el Efesé.

Tenía una buena propuesta del Rayo Vallecano, donde ya estuvo en la campaña 2009-10, también con Pepe Mel en el banquillo. Cayó a mitad de liga y lo sustituyó Felipe Miñambres. Hizo 15 goles aquel año. Ahora, los de Vallecas lo pretendían. Pero no era una prioridad para su actual técnico, Andoni Iraola. Ni para Jorge Almirón en el Elche. Sí para Borja Jiménez en el Cartagena. Ahí estuvo la clave. No hizo falta mucho más. Rubén Castro eligió pronto. Iría al Efesé.

Última campaña.
15 tantos en 24 partidos con Las Palmas.
El exjugador del Betis, máximo goleador histórico del club verdiblanco con 148 tantos entre 2010 y 2018, sí habló de cifras. «Sé que puedo dar mucho aquí. Llevo un día de entrenamiento con el grupo y es poco tiempo para decir muchas cosas, pero estoy muy contento. Me gusta hacer goles, soy jugador de área, de buscarme la vida para marcar. Eso es lo que más tengo y siempre intento superarme. Llevo dos años seguidos metiendo 15 tantos y lo bonito sería que los superara. Ese es mi reto personal. En lo colectivo, sé que soy importante para ayudar a que el equipo logre la permanencia», declaró el futbolista.

Prudente
"Lo primero es asegurar la categoría, que es el objetivo, y creo que entre todos lo vamos a lograr. Veo que hay un gran vestuario y eso es importantísimo para conseguirlo», insistió. «Hay que ser prudentes y pensar solo en sumar los puntos que hacen falta para salvarnos», recordó. Él es un animal competitivo, cuida al detalle su alimentación y tiene mono de fútbol. Se ha perdido muy pocos partidos por lesión en su carrera, que este año llega a las 20 temporadas en la élite.

Noticia: La Verdad de Murcia

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