Tenía que ser Kirian (1-0)

Sorprendió con algunas novedades en el once García Pimienta, dejando en el banquillo a Sory Kaba y apostando de inicio por Máximo Perrone y Pejiño como sustituto del lesionado Sandro.

Monólogo amarillo en los primeros compases de partido ante la desesperación del entrenador visitante, Paco López, que veía como sus jugadores no rascaban bola ante la superioridad con balón de la UD Las Palmas, que dispuso de varias ocasiones y al que le fue anulado un tanto por fuera de juego.

Duelo de contrastes entre el equipo menos goleador, la UD Las Palmas que llegaba al choque con un solo tanto en su casillero y el que más encaja, el cuadro Nazarí que había recogido el balón de su portería en 16 ocasiones antes del partido de hoy.

Los andaluces intentaban salir a la contra buscando los espacios, con un Melendo, bastante activo. Unizi, que llegaba tocado, intentaba incordiar a la defensa insular en ocasiones aisladas.

Se fue desinflando Las Palmas y aprovechó el Granada para empezar a coger dominio del partido y comenzar a inquietar la meta de Valles.

Munir tras aprovechar un rechace volvió a marcar pero nuevamente el gol no subió al marcador por fuera de juego. El segundo tanto que se le anulaba al internacional marroquí en la tarde de hoy.

El Granada estuvo a punto de adelantarse en el marcador pero Julián Araujo con un corte providencial alejó el peligro. Poco después, los dos centrales de la UD Las Palmas veían sendas tarjetas amarillas en una acción muy protestada por la parroquia local.

VUELVE MARVIN. El carrilero mallorquín fue la novedad del segundo tiempo, en el que se quedó en el banquillo Pejiño, un tanto gris en la primera parte.

Se reclamó un penalti por manos de Perrone pero el árbitro no decretó nada punible a instancias del VAR mientras el partido se calentaba y la UD Las Palmas no se encontraba cómoda.

El partido se complicada cuando Mika Mármol veía la segunda tarjeta amarilla tras una entrada sobre Lucas Boyé y dejaba más de media hora con diez al equipo de García Pimienta, cuyo rostro era un poema en la banda ante el cariz que tomaban los acontecimientos.

Una acción de Marvin en la que presionó al guardameta la intentó colar Jonathan Viera con un globo que se marchó alto.

El partido se rompía y se entraban en unos minutos dramáticos mientras entraba Saúl Coco para tapar la vía de agua en el casco del equipo insular.

Jonathan Viera y Munir dejaron su puesto a Javi Muñoz y Sory Kaba en busca de una vuelta a un partido que se había puesto cuesta arriba a falta de 25 minutos para el final. Pimienta apostaba por el físico para lo que quedaba, que aún era mucho.

Con un jugador menos lo pasó mal la UD Las Palmas, que intentaba juntar líneas ante un adversario que se notaba poderoso con superioridad numérica.

Sory Kaba, tras una gran galopada de Araujo, que envió un centro medido y con toda la portería vacía envió incomprensiblemente fuera de cabeza cuando se cantaba el gol: ocasiones como esas iba a haber muy pocas en inferioridad numérica.

Estuvo más entero el equipo amarillo en la recta final del encuentro en la que rondó el gol en varias ocasiones claras hasta el pitido final del choque en el que se reclamó un posible penalti por manos en el área andaluza.

En el tiempo de alargue debutó Cristian Herrera en busca de la épica y entonces Kirian se sacó un zarpazo espectacular con la izquierda para romper el mal fario y dejar los tres puntos en casa: tuvo que ser él.

Foto: LaLiga

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